Años y años de trayectoria, premios, trabajos y reconocimientos… hasta que llegó Medea. Aitana Sánchez-Gijón se ha mantenido siempre en un lugar relevante de la interpretación en este país, ya sea en teatro, cine o televisión… Incluso se atrevió a dar el salto al resbaladizo mundo de la gestión en su calidad de presidenta de la Academia de Cine de España… Pero ningún personaje, ningún trabajo le ha hecho llegar a los extremos como esa Medea que le regalara Andrés Lima, director y autor de la adaptación del montaje que llevó a la escena el proyecto de Teatro de la Ciudad durante la temporada 2015-16. “Medea ha supuesto un punto de inflexión muy profundo en mi crecimiento personal y en mi maduración como actriz”, ha venido confesando la actriz desde que arrancara aquel proyecto en el escenario del Teatro de la Abadía de Madrid.
La vida del montaje teatral tuvo su lógico desarrollo, acompañado por premios y aplausos, un mar de críticas que ensalzaron un magnífico espectáculo, una gira bien programada que le llevó por algunos de los mejores escenarios de este país, y algún momento crepuscular como aquella noche en las ruinas del Festival de Mérida… Créanme, esas noches, cuando se viven tardan mucho tiempo en olvidarse. Con este personaje, Aitana Sánchez-Gijón obtuvo el premio Ceres, el premio Valle-Inclán y el Premio Max a la mejor protagonista. Teatro de la Ciudad fue elegido como el mejor proyecto de producción privada por su trilogía Antígona, Edipo Rey y Medea…
Acabó la gira y Aitana se volcó en otros proyectos, pero Medea se quedó dentro, agarrada de manera visceral a las entrañas y al pensamiento. Medea, perturbadora y convulsa, uno de los grandes personajes de la literatura universal, brillante y oscura Medea, mujer desquiciada por los celos, abandonada, repudiada y enviada al exilio que mató a sus hijos en un ejercicio de amor y destrucción.
Y ningún crimen lo cometí por odio, sino por amor hacia ti. No hay mayor dolor que el amor, canta Medea
Así que la actriz vuelve a tener la necesidad de reencontrarse con el personaje de Medea, en esta ocasión en un espectáculo en forma de lectura dramatizada que se presenta en el escenario del Teatro del Barrio de Madrid del 18 al 21 de enero. Durante una hora aproximadamente, Aitana Sánchez-Gijón vuelve a cruzar la frontera de la locura para dejarse llevar por un amor exacerbado que va más allá de lo racional, que la hace cometer el acto más atroz y horrible de todos como es matar a sus propios hijos. Y es que, como confiesa la actriz, «hay personajes que nunca te abandonan, que se te quedan pegados a las tripas como solitarias insaciables. Medea me colonizó por completo en el montaje de Andrés Lima para el Teatro de la Ciudad y necesita que la saque a pasear de nuevo. Yo lo necesito. Por eso, por una cuestión de salud, de higiene mental y emocional, retomo en un formato más íntimo esta tragedia eterna«.
La actriz habla con el público, explica el porqué de esta propuesta, le cuenta el mito de Jasón y los Argonautas y, mezclando algo de lectura con mucho de interpretación, “da voz a todos los personajes, entre los cuales emerge Medea despojada, poderosa, terrible y dolorosamente humana”.
Por ti he matado y he parido. Yo tu perra, tu prostituta yo. Yo peldaño de la escalera de tu gloria ungida con tus excrementos, sangre de tus enemigos, narra Medea
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