La directora de escena y dramaturga Verónica Rodríguez es la encargada de llevar a las tablas del Teatro La Fundición de Sevilla este texto de “rabiosa actualidad” como ella misma afirma. Protagonizada por Alicia Moruno y con Miguel López y Nacho Gómez, la función cuenta la historia de Justina, una joven villana que tendrá que habérselas y encontrárselas para sobrevivir y salir airosa de más de una situación que pone en tela de juicio a una sociedad en constante crisis de valores. Un exponente olvidado de la picaresca española, atribuida a Francisco López de Úbeda y primera novela protagonizada en España por una mujer, que Verónica Rodríguez ha decidido traer a nuestros días en una versión muy fiel de Luis Felipe Blasco Vilches.
“La propuesta de rescatar a la pícara Justina, un personaje muy irreverente y rebelde, sacarle el polvo y trasladarla al teatro era algo que en sí ya me parecía interesante”, nos cuenta Rodríguez, “Pero es al recibir la adaptación final cuando tiendo un puente entre mi teatro y la historia de Justina”, publicada en 1605. “Lo que más me llamó la atención es que nada ha cambiado. La posición de la mujer respecto al mundo que le rodea es la misma. La Iglesia otorgaba una serie de comportamientos a la mujer que incluso a día de hoy mantenemos”, afirma la directora de escena.
Estreno
Destaca Verónica Rodríguez que Luis Felipe Blasco Vilches ha firmado una adaptación»muy fiel a la pícara de Úbeda”, aunque han pasado más de 400 años y «la evolución es minúscula”. Recuerda un momento de la novela en la que Justina tras recibir abusos por parte de un grupo de jóvenes borrachos en una romería, tiene que recibir los machistas consejos de un alguacil: “No bailes y no te pasará nada”. Es inevitable pensar en las campañas de concienciación contra el abuso a mujeres que se han tenido que hacer este año en fiestas como los San Fermines de Pamplona o la Semana Grande de Bilbao, entre otras, tras las denuncias de abusos en años anteriores.
Es por eso que Verónica Rodríguez decide traer la historia a 2016: “Es un riesgo, pero veía necesario que esta historia conectara con una chica joven de hoy y hacerlo de una forma entretenida, incluso festiva, fresquita, para que el público más joven, el que tiene la edad de la protagonista, salga del teatro con ganas de más teatro y un poco más concienciados. Y eso con la adaptación de Luis Felipe (Blasco Vilches) ha sido muy fácil, porque ha hecho un trabajo brillante siendo muy fiel al texto original.”
“El teatro nos tiene que ayudar a sobrevivir”
Pero Justina no es la única mujer que tiene que sobrevivir en un mundo de hombres. “Se relaciona y se supone que en el entorno teatral somos muy abiertos, liberados, es más difícil que parezca obvio, pero lo cierto es que el trabajo de una mujer como directora de escena se valora de una forma diferente, incluso en la propia actitud de los equipos de trabajo. Cuando la dirección es de una mujer, su palabra tiene menos peso».
Una realidad que acompaña a un sector en Andalucía que tiene una “delicada” salud: “Aunque yo prefiero mirar a una parte de la profesión que tiene una salud de hierro”. Para Verónica Rodríguez, esa parte está integrada por un teatro casi invisible, de resistencia: «Muchas compañías en Andalucía que arriesgan, que hacen puestas en escenas maravillosas con presupuestos muy pequeños. Creadores que arriesgan, con montajes muy sinceros y honestos y en donde realmente se investiga. Su difusión es más frágil y es ahí donde hay que mirar, ahí sí tiene salud el teatro”.
De dilatada carrera, con premiados montajes como Las dos Saras o La Primavera de Lola, la directora de escena Verónica Rodríguez echa en falta más critica. “El teatro existe para cambiar las cosas. Filosofía y poesía tienen que estar en el escenario. Ya sea riendo o llorando. Pero si no la hay, el teatro pierde energía y pierde sentido… Yo no sé vivir sin metáforas. Para sobrevivir en la vida hace falta poesía y el teatro nos tiene que ayudar a sobrevivir”.
En cuanto termine las funciones en La Fundición de La Pícara Justina, Verónica Rodríguez se mete de lleno en su nuevo espectáculo: Tóxicos. Este texto de Alejandro Butrón se alzó con el XXI Premio Letras Hispánicas de la Universidad de Sevilla y que llevará a escena, producido por CICUS, junto a los actores Verónica Morales y Miguel López que se desdoblarán o multiplicarán en varios personajes para hablarnos de las relaciones tóxicas.