Paco Bezerra ha conseguido un texto complejo y punzante sobre el acoso escolar y la creciente violencia en las escuelas a partir de casos reales, eso sí, ocurridos en los Estados Unidos (dos niños acosados y expulsados de sus colegios por llevar una mochila de My little pony) Cuando nos sentemos en la butaca nos encontraremos una intensa y conmovedora historia resuelta sin aspavientos ni fuegos artificiales, con dureza y que nos invita a la reflexión.
Si la apuesta es arriesgada, también merece un destacado la pareja María Adánez-Roberto Enríquez, que se meten en la piel de unos padres aturdidos por la realidad y que son superados por un problema cada vez más frecuente. Y es que, en este caso, los padres tampoco saben ni qué hacer ni cómo hacer frente al drama que sufre su hijo
La obra de Bezerra nos pone sobre alerta… Cuantas veces se repite la misma historia. A mi no me pasará, decimos, y cómodamente miramos hacia otro lado hasta que la realidad nos atropella con fatales resultados. En la vergüenza y en la negación comienza nuestro fracaso, porque no sabremos ayudar a nuestros hijos ni encontrar una solución adecuada al drama del acoso (bullying) si optamos por el silencio y esquivamos la mirada. Cuenta el autor que él mismo fue objeto de acoso en su adolescencia almeriense. Seguro que durante años fue el chico raro que tiempo después destila coraje y talento para llevar a escena una obra que ningún padre (o profesor) debería dejar de ver.
El autor y los responsables del montaje dedican la obra de teatro a Michael Morones, a Grayson Bruce y a todos los niños y niñas que, como ellos, han sufrido insultos y agresiones sin que ningún adulto a su alrededor haya hecho nada por evitarlo. ‘El pequeño poni’, hasta el 16 de octubre en el Teatro Bellas Artes de Madrid.