Con 14 nominaciones, La La Land, pensaron algunos, podía hacer historia con una cosecha de cerca de diez estatuillas, pero se tuvo que conformar con menos de la mitad de sus candidaturas, sin lograr algunas recompensas tan significativas como la de guión, actor, y varias de las técnicas, aparte de la de mejor película.
Este honor recayó en Moonlight, que la víspera había sido considerado ya la mejor del año en los galardones del cine independiente, los Spirit, obtuvo además los premios a mejor actor de reparto, Mahershala Ali y a mejor guión adaptado para Barry Jenkins y Tarell Alvin McCraney.
Manchester by the Sea se llevó otros dos reconocimientos destacados, el de mejor actor para Casey Affleck y el de mejor guión original para Kenneth Lonergan. Otras dos estatuillas -técnicas- fueron para la cinta de Mel Gibson Hacksaw Ridge, las de edición y mezcla de sonido. Otro de los galardones inesperados fueron para la iraní Forushande, de Jafar Farhadi, y en general el notable reparto de recompensas, que afectó a una decena de títulos.
Premios Oscar
Lo que parecía podía ser la gala más política de la historia no llegó tan lejos, aunque el presentador Jimmy Kimmel estuvo periodicamente revisando el Twitter del presidente Donald Trump a la espera de unos comentarios que no llegaron. Mientras el ocupante de la Casa Blanca, que «contraprogramó» organizando una cena de gobernadores, ignoró a los profesionales «sobrevalorados», algunos de los que pasaron por el escenario del Teatro Dolby no hicieron lo mismo.
Uno de los más que se significó -lo que no es ninguna sorpresa si se le sigue en redes sociales- fue el actor Gael García Bernal, presentador de una de las estatuillas, quien proclamó: «Como mexicano, como latinoamericano, como trabajador emigrante, como ser humano, estoy en contra de cualquier forma de muro que quiera separarnos».
Puede que no hubiera tantas referencias activas contra la política xenófoba de Trump, pero el resultado completo de esta edición es una clara reacción a sus planteamientos: Una ceremonia marcada por la diversidad, en la que el Oscar a mejor película extranjera correspondió a un film –Forushande– cuyo director renunció a acudir en solidaridad con sus compatriotas que según el decreto del nuevo presidente no podían entrar en el país (suspendido provisionalmente por la Justicia).
Volviendo al error que probablemente acabará convertido, por no haberse dado antes jamás, en el sello histórico de estos Oscars, según los medios parece que a los presentadores se les entregó un sobre que era copia del de mejor actriz, donde aparecía el nombre de Emma Stone y La La Land, y por tanto dijeron este título. Mientras los productores de la cinta de Chazelle se disponían a agradecer la estatuilla, se corrigió la confusión, y el Oscar acabó en manos del equipo de Moonlight.
Estos fueron los ganadores: