En España el principal problema es el partido que tenemos en el gobierno, que no cree en la cultura. En España tenemos un problema de caciquismo clasista, ancestral, medieval mezclado con el capitalismo salvaje de un gobierno que ha impuesto un 21% de IVA a la cultura y que destruye la industria cultural.
Un impuesto tan alto sobre la industria de la cultura, el más alto de Europa, es un sinsentido. Porque la cultura es España, porque un país sin cultura pierde su identidad. Para mí este gobierno ha traicionado al ciudadano español y a España como país.
Un país es su idioma o idiomas, si no se proyecta la industria de su idioma ¿dónde va a llegar?.
Con lo único que ni China, ni la India, ni otros países que tienen trabajadores esclavos pueden competir con nosotros es con la industria cultural que se basa en la lengua. Nuestro teatro, cine y música se crea y distribuye en nuestra/nuestras lenguas. Además nuestra lengua es la segunda más hablada por todo el planeta (el chino de momento fuera de China se habla poco) y la que más se estudia, después del Inglés, como segunda lengua en las escuelas.
Lo bueno de Francia es la revolución Francesa que terminó con ese caciquismo medieval absolutista, colocó a la Iglesia fuera del estado y creó un pensamiento universal en todo el pueblo francés (independiente de su ideología): “La cultura francesa es más importante que su propio territorio”.
Sin embargo nuestros 40 años de Franquismo hicieron justo lo contrario. Recordemos que la mayoría de cabezas culturales y científicas pensantes fueron exterminadas o se exiliaron para sobrevivir. Nos convirtieron en un país huérfano culturalmente.
La cultura es de todos, no de una ideología. Por lo tanto, el gobierno del PP tiene un problema de incultura, catetismo, patetismo y paletismo que es lo que es nuestro gobierno: un gobierno de paletos.
Podríamos tener una industria cultural tan fuerte o superior a la francesa, pero la estupidez comercial cultural de nuestros gobiernos (lastrados por nuestro pasado absolutista) y, fundamentalmente ,los del PP nos llevan a pérdidas astronómicas en este sector.
La falta de visión futura de nuestro gobierno, en un mundo en los albores de su 3ª revolución industrial, donde la comunicación universal está cambiando los hábitos sociales, nos lleva a perder un tren que gracias a nuestro idioma lo tendríamos más fácil de coger que otros países con una difusión lingüística menor.
Una industria cultural potente defendida por los que manejan nuestros impuestos como si fuese su propio territorio, podría ser el detonante de un ingreso de divisas mayúsculo.
En el nuevo mundo que estamos comenzado a vivir, donde las fronteras se disuelven, nuestro país es nuestra cultura, sin cultura no hay país.
